Los síntomas
suelen presentarse entre los 30 y 50 años de edad
ARTRITIS
PSORIÁSICA: UNA ENFERMEDAD DE LA PIEL
QUE AFECTA
LAS ARTICULACIONES
Aunque no
hay estudios concluyentes, se estima que puede haber cierta predisposición
genética que lleva a 15% de las personas con psoriasis a presentar problemas
articulares
La artritis psoriásica es un tipo de
inflamación articular que presentan aproximadamente 15% de las personas con
psoriasis. Esta patología puede afectar cualquier articulación del cuerpo y
originar síntomas molestos como dolor, hinchazón y disminución de la movilidad
articular. A largo plazo, las áreas afectadas pueden llegar a deformarse, lo
que puede limitar considerablemente la
capacidad de moverse.
Según el Doctor Óscar Urdaneta, Reumatólogo
especializado egresado de las Universidades de Edimburgo y St. Thomas y en el Hospital
José María Vargas, Director de la Fundación Venezolana de Enfermedades
Reumáticas y Trastornos Autoinmunes Sistémicos (Fundaveritas), aún no se sabe con
exactitud qué causa la artritis psoriásica, pero lo que sí se conoce es que 40%
de los pacientes diagnosticados tienen un familiar con psoriasis o artritis, lo
que sugiere que existe un componente genético.
La artritis psoriásica se presenta
tanto en hombres como en mujeres, y por lo general se empieza a manifestar
entre los 30 y 50 años de edad; sin embargo, hay casos poco comunes en los que
se presenta durante la niñez. Para el diagnóstico los reumatólogos observan
patrones de artritis como el dolor y la hinchazón en las articulaciones, así
como cambios en la piel y las uñas, producto de la psoriasis.
“Aparte de las observaciones
clínicas, se le deben tomar radiografías al paciente para conocer el daño
articular. También se puede recurrir a una resonancia magnética, una ecografía
o una tomografía computada para observar las articulaciones con más detalle,
seguidamente se realizarán análisis de sangre que revelarán los niveles de
inflamación y cualquier otra alteración al laboratorio”, acotó Urdaneta.
El tratamiento varía dependiendo
del nivel de dolor e inflamación que manifieste el paciente y el avance de la
patología. “Las personas con artritis leve pueden requerir tratamiento cuando
el dolor en las articulaciones sea muy fuerte, aunque por lo general se maneja
bajo una terapia con antiinflamatorios no esteroideos. Si la artritis no
responde al tratamiento inicial pueden recetarse fármacos antirreumáticos que
modifican la patología”, detalló Urdaneta.
“Otros medicamentos son los agentes
biológicos del tipo anti factor de
necrosis tumoral, que están disponibles desde hace menos tiempo, y ayudan a
mejorar tanto a la artritis como a la psoriasis cutánea”, comentó el
reumatólogo.
Muchas
personas con artritis psoriásica desarrollan rigidez en las articulaciones y
debilidad muscular, por ello el médico destacó la importancia de mantener un
estado físico adecuado. “El ejercicio es muy importante para mejorar la salud
general y mantener las articulaciones flexibles. Caminar es una excelente
manera de ejercitarse, utilizando plantillas ortopédicas que ayudarán a evitar la
presión innecesaria sobre pies, tobillos o rodillas afectados por la artritis”,
afirma el especialista.
Además de la caminata, el doctor Urdaneta
indica que se pueden realizar diversos
ejercicios como la bicicleta estacionaria, yoga, natación, terapia física o
ejercicios de estiramiento, etc., que ayudan a relajar la tensión en las
articulaciones
Puntos para recordar• La artritis psoriásica es un tipo de artritis crónica. En algunas personas es leve, con sólo brotes ocasionales, pero en otras es permanente y puede causar daño articular si no se la trata a tiempo. • Seguir al pie de la letra el tratamiento médico ayuda a aliviar el dolor, proteger las articulaciones y mantener la movilidad. • La artritis psoriásica se puede diagnosticar erróneamente como gota, artritis reumatoidea u osteoartritis
Fuente: Comstat Rowland