24 sept 2014

Cómo decirle a tu equipo que... ¡se está equivocando!

La diversidad de los equipos de trabajo exige, por parte del directivo, táctica y versatilidad cuando se habla de comunicar errores. ¿Tienes lo necesario?



A ningún profesionista le gusta ser regañado o reprendido, sobre todo cuando hablamos de su trabajo. Sin embargo, la diversidad en la oficina se ha convertido en toda una experiencia para los directivos cuando hablamos de retomar los errores en nuestros procesos y productividad. ¿Cómo dejar de ser el malo y convertirte en un líder asertivo?

Para hablar de “malas noticias” hay que tener en claro de que sí existen formas para hacerlo y que debemos dejar a un lado aquella que pueda enredar la situación, comprometer a alguien en específico o en la que haya que mentir. Como buen líder debes voltear a ver aquella que te permitirá abrir puertas hacia la comunicación, la que creará un impacto positivo y, sobre todo, ésta que te permitirá inyectar a tu equipo de energía nuevamente. 

Primero, lo que NO debes hacer
No grites. Puede ser que estés desesperado o que te haya sorprendido el resultado negativo que obtuviste, sin embargo, debes tratar el asunto con toda la inteligencia emocional que tienes, respirar y dejar a un lado los métodos arcaicos de que gritando la gente entiende. 

No mientas. Si bien es cierto que debes tener táctica para decir las cosas, evita mentir por tratar de minimizarlas o crear un buen impacto con tus equipos, en verdad, mentir no funciona en ningún caso. 

Nunca comiences con una mala noticia. La objetividad también debe ser cuidada. Si la pregunta es ¿por qué? Es por el impacto negativo que causas en los colaboradores, directivos y socios. Si comienzas con una mala noticia, las técnicas para mejorar los números, para iniciar un proyecto alterno o las metas para alcanzar el objetivo quedarán hechas trizas. 

Respeta a tu equipo y a tu gente. Este es uno de los puntos más importantes, recuerda que hablas con personas valiosas para tu empresa y que el respeto es fundamental para que la gente entienda y se comprometa.

¿Son malas noticias? Aprende cómo hacerlo
De acuerdo con el portal es.wikihow.com existen muy buenas técnicas que podrían ayudarte a dar las malas noticias de una manera preparada, consciente y con táctica. ¡Pon atención! Esto podría ayudarte, no sólo para comunicar malas noticias a tu equipo, sino para hacerlo con directivos, proveedores y clientes. 

La técnica del giro
Se trata de envolver la noticia, por ejemplo. “Es importante mencionar que los objetivos podrían ser alcanzados este trimestre si redoblamos esfuerzos y triplicamos los resultados en el periodo restante”. ¿Lo viste? No mencionamos que los objetivos son incansables, sin embargo, aseguramos que se necesita el doble de esfuerzo, traducido en tiempo, y que hay que mejorar “tres veces” los resultados del primer mes; se busca dar la mala noticia con un toque de optimismo. 

¿Cómo hacerlo? 
1. Prepárate. La información es importante y debes tomarla en cuenta para esta técnica, puede ser que tu equipo se vaya por lo más optimista, así que debes estar preparado para las preguntas que pueden hacerte. 

2. Utiliza estadísticas. Muestra a tu equipo qué se necesita hacer y compáralo con trimestres en los que hayan tenido buenos resultados, habla sobre productividad, horas extra, trabajo en equipo y proceso, todo acompañado de números que lo refuercen, esto ayudará muchísimo. 

3. Menciona los puntos importantes. No se trata de marcar los errores con plumón rojo, asegúrate que los puntos estratégicos del “cómo mejorar” sean tratados de manera urgente y específica. Recuerda, se busca asertividad con tu gente, pero cuando se trata de las malas noticias, tú tienes la palabra. 

4. Sé optimista. Es muy importante demostrar la mejor actitud con tu  gente, ellos deben verte preocupado por los resultados, pero entusiasta por alcanzarlos. El ser positivo se contagia, cuida hacerlo con tu equipo. 

La técnica Compara y minimiza 
No se trata de cubrir los errores, buscamos crear un menor impacto de lo negativo y mejorar lo necesario para alcanzar los objetivo, por ejemplo: “Sabemos que día con día nos hemos esforzado para llegar a los números deseados. Sin embargo y a pesar de ello, los resultados han sido negativos. ¿Recuerdan el periodo en el que caímos tres puntos respecto a los planes de la empresa? Estamos bajo las mismas circunstancias”. Verifica que tu equipo tenga la confianza de que pueden arreglarlo, pero también cuida de darles esta parte de alerta en la noticia. 

¿Cómo hacerlo?
1. Busca similitudes. Verifica que haya un periodo o un reporte donde la situación haya sido similar y háblales de los resultados y consecuencias. 

2. Enumera lo bueno que se ha hecho. Asegúrate de que ellos sepan que también hay cosas buenas cuando hablamos de su trabajo, así cuidaras su autoestima y podrás entrar con nuevas alternativas. 

3. Habla  con perspectiva. Es importante de hablar con miras hacia el futuro y  hacia mejorar resultados. No se trata de quedar bien, se trata de ser diplomáticos. 

4. Especifica números. Es importante que dejes en claro los nuevos objetivos y la metodología a conseguirlos, tu equipo debe estar enterado que van por mal camino, pero que si se mejora en “tales aspectos” la situación cambiará de manera positiva, debes orillarlos a hacerlo. 

El método “sándwich” 
Es muy sencillo, pero se debe tener cuidado. Esta técnica se debe presentar con una lista comparativa entre las buenas y malas noticias, de manera literal, realiza una lista con los puntos malos a discutir y aquellos que pueden ser rescatados o mejorados. 

¿Cómo hacerlo? 
1. Sé puntual en las buenas noticias. Asegúrate de no espantarlos, lo que buscas es un entendimiento de la situación y no una mentalidad apocalíptica. 

2. Presenta los hechos. No buscamos que realices un otorgamiento de culpas, busca que vean los números que los han llevado a esa situación. Tu equipo es tu mejor arma, cuida que exista una comunicación que retroalimente las perspectivas. Puedes comenzar con lo que “creas” se hizo mal y pregunta su opinión, ellos se sentirán con la libertad de hablarlo y solucionarlo. 

3. Evita las excusas. Cuando hablamos de números que pueden perjudicar a la empresa no existen escusas. Recuerda ser muy directo, pero con tacto. 

4. No señales culpables. Esto no funciona así, si ves que existe un elemento que necesita platicar en privado, hazlo en privado, evita culpar y que tu equipo se culpe entre ellos, esto puede ocasionar rupturas y desmembramiento del equipo. 

5. Da soluciones. Siempre debes terminar con soluciones precisas, busca números y métodos que ayudarán a tu equipo en lograrlo, también es bueno que adviertas las consecuencias de no hacerlo, pero recuerda, siempre con una actitud positiva. 

¿Crees que estas metodologías funcionen en tu empresa? ¿De qué manera comunicas a tu equipo que las cosas van mal?

Fuente: http://www.altonivel.com.mx
Leer más: http://www.altonivel.com.mx/41093-como-decirle-a-tu-equipo-que-se-esta-equivocando.html