Aunque el papel del community manager se ha posicionado al grado de que tanto agencias especializadas como marcas ya lo han agregado a sus organigramas, hoy surge el tema respecto al curador de contenidos, ese personaje que si bien no es un CM, tampoco es un monitor ni un especialista en benchmark, pero cuya presencia en la organización de una empresa, resulta cada vez más importante.
El content curator o curador de contenidos es el responsable de asuntos muy claros: buscar, seleccionar, evaluar, adaptar y compartir contenidos de terceros que resultan de interés para una marca, es decir, observar qué hay afuera que podría interesar adentro.
Y, por supuesto, no se trata de robar, copiar o refritear contenidos o posteos de otras marcas. En buena medida el concepto “curador” se refiere a mediar entre un contenido ajeno y el proceso requerido para poder adaptarlo y hacerlo propio, eso sí, siempre ofreciendo el crédito al creador original.
Cabe resaltar que esta figura opera en el mundo online pero también en el offline. Es decir, lo mismo produce contenido para las plataformas digitales (redes sociales, blogs o sitios oficiales), y también crea contenidos de consulta, de referencia o información útil para departamentos específicos al interior de una organización.
Antonio Villa, curador de contenidos en Community Curator, aclara que si bien esta tendencia se refiere a la adaptación de contenidos ajenos, sería un error considerarla “la pariente pobre de la creación original”, ya que su existencia obedece, en muchas ocasiones, a la falta de contenidos propios, y sin lugar a dudas, no existe una marca que abarque todo el espectro de opciones, razón por la que siempre habrá contenidos ajenos valiosos y rescatables.
¡CUIDADO! La curación de contenidos no es la pariente pobre de la creación original
3 claves para la correcta curación de contenidos
Aunque hoy existen herramientas que facilitan la curación de contenidos (Feedly, Scoop.it, Flipboard, Paper.li), el experto considera que esta actividad no debe ser confiada ni a algoritmos ni a plataformas automatizadas, ya que este perfil implica un absoluto dominio del medio y del ecosistema en que se desarrolla una marca.
Así que para identificar las diferencias entre el simple hecho de AGREGAR información y la correcta CURACIÓN de contenidos, el experto explica las tres principales características que te dejarán ver en dónde radica la importancia del content curator.
¿Automático o manual?
Agregar es el más puro estilo de automatizar los contenidos que te interesan para publicarlos en cualquier plataforma digital. Así, sin filtros, sin comentarios, sin trabajo de edición. Ya sea a través de feeds de RSS para actualizar contenidos en tiempo real. La curación, por el contrario, es manual y nunca podrá ser tan rápida como la forma automática.
Flipboard o Pulse, por ejemplo, agregan la información en tiempo real luego de haber seleccionado nuestros temas de interés, y aunque no aplica ningún filtro, suele ser útil, sobre todo cuando son temas relacionados con valores o noticias.
Aquí, la curación no ofrece contenidos “a granel”. Su esmero radica en seleccionar “grano por grano” los temas y necesidades de cada audiencia. Así que estamos hablando de un proceso manual, humano y con un gran nivel de criterio editorial, ya que el curador de contenidos es el cerebro que humanizará las soluciones tecnológicas que tienden a automatizar dichos contenidos.
Enfoque
Una vez más el criterio editorial que te da tanto la preparación profesional como la propia experiencia, será el responsable de enfocar la estrategia en la curación de contenidos. ¿Qué hacemos con la información? ¿Qué le falta o qué le sobra a un contenido que nos interesa? ¿Qué queremos decir? Éstas son algunas preguntas cuyas respuestas te pueden orientar para darle el enfoque a esta actividad
Justo aquí, tanto la agregación como la automatización no tienen cabida, ya que se trata de trabajar con contenidos muy específicos y temas muy concretos, razón por la que es imprescindible que una persona esté al tanto de las actualizaciones que se hacen en torno a dichos insights.
Valor
Ya que tienes un contenido ajeno que resulta de tu interés y tienes las respuestas que te darán el enfoque de lo que harás con él, el valor que lo diferencia y te permita hacerlo tuyo será todo aquello que te deje pernearlo con tu marca: criterios, puntos de vista u otros contenidos, estos cambios no son únicos y universales, ya que al ser un proceso manual y humano, siempre podrás cambiar de opinión.
Y así siempre tendrás control sobre la gestión de contenidos futuros, mismo que se darán de una forma mucho más ágil, eficiente y clara con la curación de contenidos (y no con la agregación automatizada).
Pero no lo olvides, curar no significa cambiar la cabeza o el titular de un texto, o modificar el filtro de una imagen. Para curar se requiere rehacer lo que alguien hizo y que hoy te inspiró para recrearlo con el enfoque que requiere tu audiencia y consignando el crédito (con liga al sitio) de quien produjo la información original.
¿Curas contenidos? ¿Cómo lo haces?
Autor: OLIVERIO PÉREZ VILLEGAS
Fuente: http://www.altonivel.com.mx
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