17 jun 2013

Alimentación para ejecutivos que viajan: 3 reglas de oro

¿Los constantes viajes están afectando tu alimentación? Sigue una serie de consejos básicos para que tu estómago no pague las consecuencias.

Para los profesionales ejecutivos, viajar es una actividad que va incluida en el trabajo. Sin embargo, a pesar de ser algo común y cotidiano, la dificultad de seguir con tus hábitos normales de vida y sobre todo de alimentación, pueden provocarte problemas digestivos que alteran tu rendimiento y productividad. 

Y muchas veces, por más que quieras mantener tu alimentación, es normal que ésta se vea afectada cuando viajamos: cambian los horarios, los alimentos que elegimos e incluso nuestra actividad física y con ello, nuestra digestión se ve mermada, sufriendo consecuencias importantes.

Pero hay buenas noticias, puedes realizar los viajes de negocio sin tener que sufrir las consecuencias y seguir con un estilo de vida saludable incluyendo en tu dieta agua, fibra y frutas, para motivar a tu aparato digestivo a funcionar de manera adecuada, estés donde estés y sin importar los horarios en los que puedas comer.

A continuación te damos algunos consejos y evitar los molestos síntomas de la mala digestión cuando viajas:

Consume una porción de frutas o verduras en cada comida del día que hagas.

En el desayuno, prefiere las frutas frescas picadas, pues contienen más fibra y te ayudarán a mantenerte sin hambre por más tiempo.

Elige el plato fuerte de tu preferencia pero haz un cambio inteligente, pídelo acompañado de verduras o una porción de ensalada.

Si quieres una cena ligera, una porción de cereal con una taza de leche descremada y una porción de fruta, es una buena opción que te ayudará a dormir y descansar mejor para los días más atareados.
¿Crees que los cereales son sólo para el desayuno? Este es un tip que también te puede servir para tu vida diaria, espolvorea un poco de cereal de salvado de trigo sobre tus ensaladas y aumenta de manera deliciosa tu consumo de fibra.

Hidratate durante los vuelos

No todo es fibra. Para ayudar a tu digestión existen otros hábitos que también debes tomar en cuenta:

Bebe abundantes líquidos, al menos 1,5 litros (8 vasos) al día. Los líquidos pueden incluir agua, zumos, sopa, té y otras bebidas. Si tienes un viaje de muchas horas, manténte bien hidratado, esto ayudará a sentirte menos cansado y con más energía.

Disfruta tus comidas y come despacio. Dentro de lo posible, procura comer en tus horarios regulares y realizar por lo menos las 3 comidas principales del día.

Además de la alimentación es importante realizar actividad física diariamente. 

Seguramente se te ocurrirán muchos pretextos para no hacerlo, pero piensa en que el ejercicio o actividad física no sólo te ayuda a mantener un peso saludable, también te ayuda descansar mejor durante la noche, a liberar el estrés y por supuesto a tener una buena digestión.

Así que ya sabes, di sí a los viajes de negocios y no olvides seguir estos sencillos consejos que te ayudarán a llevar una vida más sana.

Fuente: Alto Nivel
Link Original: http://www.altonivel.com.mx/33488-consejos-de-dietas-para-viajeros-de-negocios.html