¿Hay Sexismo En La Publicidad De Juguetes?
La Navidad está a la vuelta de la esquina y los anuncios de juguetes para los más pequeños “bombardean” la televisión mientras los catálogos “invaden” los buzones. Niñas con muñecas. Niños con coches de control remoto. Tonos rosas para ellas. Azules para ellos. ¿Sigue habiendo sexismo en la publicidad infantil? Teniendo en cuenta que hasta un 60% de los niños escogen un regalo influenciados por la publicidad que reciben, según un estudio de Disney Store, el análisis de cómo son las campañas se ha convertido casi en una obsesión para evitar la venta de estereotipos que aún siguen vigentes.
Los niños están cada día casi tres horas viendo la televisión, que se convierte, por tanto, en un medio esencial para publicitar juguetes.
Algunos catálogos evitan mejor que otros la difusión de roles sexistas a los niños Por otro lado, los catálogos son editados por cada superficie o centro comercial de "forma particular y con total libertad", ya que es "imposible que haya una política unificada de marketing" en los centros comerciales existentes.
Repasando los catálogos de esta campaña navideña, algunos evitan mejor que otros la difusión de roles sexistas. Así, mientras en alguno se observa constantemente a niñas con muñecas y a niños con vehículos o con figuras de acción; en otros no aparecen menores y se publicita el juguete sólo con el precio. Sí es más común el uso del rosa y de colores pastel para diferenciar las páginas con productos destinados a las niñas. El azul o el rojo valen más para ellos.
También, en prácticamente todos los catálogos, se publicitan juguetes con cierto aire de neutralidad. Por ejemplo, una cocinita con un niño y una niña o juegos de mesa con los que aparecen representados incluso los padres. Son imágenes que hace poco no se veían. Sin embargo, hay clichés que no desaparecen, como los vehículos en miniatura con la niña de copiloto y el niño al volante.
No se han cambiado los roles clásicos ya tantas veces analizados. "No se han cambiado los roles clásicos ya tantas veces analizados en todos y cada uno de los campos de las ciencias sociales", indican un informe. Características como habilidad o solidaridad sí “se venden” por igual para niñas y niños.
En cuanto a los colores, se crea "un mundo rosa para las chicas y un mundo rojo y azul para los niños", dicen. Sobre este aspecto, los psicólogos creen que los colores "influyen más en la elección de los padres que en la del niño". "Tradicionalmente esa ha sido la distinción y los anunciantes, en función de a quien esté dirigido el producto, van a utilizar un color u otro", comentan. ¿Influye más el hecho de que un niño o una niña aparezca junto a un juguete?
Con todo, los psicólogos destacan la importancia de los padres, a veces olvidados en este asunto. "Van a ser los mediadores tanto de las elecciones como del uso futuro que tenga un juguete", aseguran. "Son los padres los que deben elegir y educar. Los niños aprenden lo que les enseñan y a veces recogen los prototipos sexistas del pasado no por la publicidad, sino por sus progenitores".
Son los padres los que deben elegir el juguete de los hijos, ya que la publicidad sí tiende a "reforzar la diferenciación y los estereotipos", aunque la intención en los últimos años es cambiar esa tendencia. "Quitar los colores identificativos sería un buen paso para generar más igualdad", apuntan.
No obstante, un estudio de la Universidad de Texas asegura que las preferencias pueden tener un origen biológico y/o genético, libre de influencias sociales o culturales. En el estudio, realizado con bebés de 3 a 8 meses, les enseñaron un camión de juguete y una muñeca. Los niños se sintieron atraídos por el primero y las niñas por la segunda. Por eso los expertos concluyeron que la posterior influencia social no hacía más que reforzar una predisposición infantil innata.
